Fui maltratado

  Me han maltratado. Cuando quise entrevistar a la directora de la escuela normal, me maltrataron... me maltrataron...


  Me agarraron por la fuerza, me dañaron, me arrastraron por toda la institución golpeandome y humillandome, como si no fuece nadie. Se burlaron de mí, me escupieron, me trataron salvajemente. Les contaré como pasó.


  Estaba yo, con mi angelical rostro, entrando a la escuela normal, cuando apareció la jefa de preseptores.
-QUE QUERES VOS ACÁ!-
-eem, yo queria...-
-VOS NO TENDRIAS QUE ESTAR ACÁ! PORTEROS, ATACAD!-


  No me dejaron siquiera reaccionar, me agarraron por las cuatro extremidades y me azotaron contra una pared...


-piedad...!- dije yo
-NOOOO!!!!!, DENLE MAS FUERTE!-


  No debí haber dicho nada, porque despues de eso me golpearon tanto, que creí que moriría, cuando alguien apareció.
-PARAD TAN SALVAJE MALTRATO!- dijo esa persona, mis ojos sangraban, y no podía ver. Escuché sonidos de espadas golpear, y el hueco sonido de una espada golpeando en la madera de un escudo, era una batalla épica, pero yo no podía ver.
  Cuando por fín pude mirar, estaba un caballero de armadura brillante montado sobre un caballo azul con una espada de dos metros, agitandola en el aire; mientras los porteros se defendian con grandes escudos romanos.
  La jefa de preseptores me tomó por el cuello y me puso un pedazo de criptonita en la sien izquierda (soy alérgico a la criptonita), y dijo que si no paraba de matar porteros me la incrustaría hasta el cerebro. 
  El caballero se bajó de su caballo y arrojó 19 shurikens hacia la jefa de preseptores, que los esquivó tirandome hacia un lado y haciendo una Matrix. Cuando quise darme cuenta estaba en manos de dos porteros, que me golpeaban en el estomago y me gritaban cosas chanchas, pero aún asi intentaba ver la épica batalla entre la jefa de preseptores y el caballero.


  El caballo azul golpeo a los porteros con sus patas traseras, les asestó un golpe a ambos en la cabeza, a uno con cada pata, y a mi me golpeó con el pene en la nuca, me dolió bastante.
  Cuando miré a mi flanco derecho, vi a la jefa de preseptores pateando la cabeza del caballero muerto en el piso, y comenzó a acercarse a mí. Nunca estube tan asustado en mi vida, el caballo azul se orinó del miedo, porque sus ojos reflejaban maldad, era como ver el infierno. cuando llegó me levantó con una mano y me dijo...


-andate-